Hacer bien las cosas, son acciones que están basadas en el tipo de conocimiento que alguien tenga o acceda, propio de esto, la invitación es abrirse a adquirir un saber en torno al funcionamiento humano. Muchos errores, se comenten lamentablemente porque las personas, desconocen la naturaleza humana, hay una falta de autoconocimiento que nubla también la posibilidad de conocer a otra persona, a mayor conocimiento de sí mismo, aumenta la capacidad de poder conocer a otra persona. Muchos padres, no pueden ayudar a sus hij@s, como les gustaría, porque no cuentan con el conocimiento más robusto que existe, conocerse a sí mism@ y a partir de eso, construir relaciones afectivas.
Educar con el ejemplo es una de las formas más poderosas y efectivas de enseñar a los niños, pues, cada acción y conducta, surgen como brújulas que guían la conducta de los hijos, por ello, cada comportamiento y cada valor, los niños tienden a internalizar y adoptar esas conductas como parte de su repertorio, dado la familiaridad que se produce, con esa forma de actuar, ya que, los seres humanos, aprendemos por imitación, los niños también son grandes imitadores y observadores, si ven a sus padres mostrando empatía, honestidad, respeto y responsabilidad, es muy probable que puedan internalizar y adoptar estos comportamientos como algo propio a su identidad.
